De un intenso dolor en el pecho a las 22:22.

 

“Mezcla de anatomía y de éxtasis, apoteosis de lo insoluble, alimento ideal para la bulimia de la decepción, el Amor nos conduce hacia hampas de gloria…”.

Silogismos de la amargura. E. M. Cioran.


La idea de la muerte es un espejo

de esos de bruja de Disney

y refleja el gas sin combustionar

todavía

Miro y siento por primera vez

el gesto que tú viste

endurecido de una duda

pasada por tiempo

y conservada en alcohol

 

El dolor en el pecho es como . . .

Así debe sentirse llevar una espada clavada

al correr entre los putos locos runners de la mañana

pero mi cuerpo se suelta

como si ya me llevaran en brazos

muertos sin brazos

muertos de brazos sin llevar nada

 

Seguro que alguien se hará cargo del gato

Él ya intuía que yo no estaba en forma

que me había quemado

en la velocidad de una triste tristeza implacable

Y en cada oportunidad  

se hizo notar por manutención

durante la visita de algún conocido

 

Por lo demás ya está bien

Adiós de miradas blancas

de risas perdidas

de amantes que se enamoraron

allá  

e hicieron caminos de regreso

con la fruta del tributo

podrida

Sabiendo que yo

sería siempre una mosca

 

Adiós directo a Cholula

Adiós tamales jarochos

Adiós cervecita mía

Nunca me había imaginado

que no poder llegar al refrigerador

me partiría en tantos pedazos el corazón

 

Voy a quedarme aquí recostado

pero no ser tan obvio

como para cantarme a traición

y tan solo porque ya no estaré

Me canté ante la estrambótica pesadilla

de los coches como mierdas por pisar

a las veintidós con veintidós

Eso sí lo cumplí

 

Al final lo he comprendido

Madre

ya no necesitaré los honores

que prometí me despedirían

cuando por fin leyeran

mi última carta de despedida

 

Omar Alej.

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