Memorias de un caracol.
Una palabra
Que de seguro es
Como una espada
Que ha gastado
La funda
La despedida. Frank Stanford.
De no haber
sido aquel día
te hubiera
amado
como lo
pediste
Como antes
Ámame como antes
Pero de
antes tú te fuiste
y me quedé
como si
nada
Nada de sol
Nada de día
Nada de
amor
Nada de
vida
Nada de
casa
Nada de
agua
Nada de
aire
Nada de
fuego
Nada de
piel
Nada de
noche
Nada de
aroma
Nada de
sabor
Nada de sueño
Nada de fe
Nada de mí
Nada de pez
Nada de
nada
Y el aire
que entró por la ventana
es el olor
de las flores
que los
restos de las noches nucleares
sembraron
en la tierra volcánica del parque
Lo que
queda
no lo
quieres
No eres yo
y no amaras
Todo el
silencio
Todo el
miedo
Todo el
llanto
Todo el
frío
Todo el
odio
Todo el
celo
Todo el mal
Todo el
dolor
Todo el
vacío
Todo el tiempo
Todo el nervio
Todo el
asco
Todo el
duelo
Todo el
hueso
Todo el
polvo
Todo el
ahogo
Todo el quebranto
Caracoles caracoles
caracoles
Qué más
puedo pretender que caracoles
La esperanza
hoy nos separa
y es lo último
que pierdo
y que tú ganas
Omar Alej.
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